domingo, 18 de febrero de 2007

Mi primer aullido


Toda resistencia tiene un final. Nunca pensé abrir uno de estos cuadernos, pero al final he claudicado. ¡Qué se le va a hacer! Nobody is perfect... y yo menos.

Si algún inconsciente se dedica a leer mis exabruptos que no me haga responsable de sus efectos secundarios. Trato de no practicar el insulto, pero a veces mi incontinencia verbal me puede. Cuando era adolescente, hace ya tanto tiempo, recorría los barrios de Madrid en busca de gresca. Me partieron alguna vez la cara, y yo no escatimé "herramientas" en la defensa. Una joya, vamos.

Ya me cansé. Este es un aullido de lobo cansado. Vendrán más. Como prueba es suficiente.
Por supuesto, quería que el gran Tony Soprano encabezara esta entrada. Cuidado con él, su mirada es turbia.

1 comentario:

Jas dijo...

joder, cagonlaputa, ostiaputa, pendejo, etc...con 2 cojones...ale, ya te he inaugurado el apartado de comentarios y espero que a tu gusto, sino ya sabes...lo borras y fiesta.