lunes, 23 de abril de 2007

La serie

Ya he comentado varias veces lo de mi vagancia. Lo que no he dicho es que no puedo estar parado. Eso me ha llevado a tener sobre la mesa tres guiones de cine. Uno está rematado y no admite más versiones. Cualquier retoque implica una nueva película y no es el caso. Se trata de una comedia fantástica cuyo presupuesto -ya ha sido presupuestado y hecho plan de rodaje- está en 5,4 millones de €. La cosa pinta jodida y además -esto no lo sabe nadie- he decidido que no quiero dirigirla. Cuando se enteren mis socios, o me matan o me montan una fiesta.
El segundo es un thriller, basado en una novela de la que obtuve los derechos hace años. Cuando tenga al actor que quiero conseguiré montar la película, mientras tanto, a esperar, que es lo que hacemos los que nos dedicamos a este jodido negocio.
El tercero es un drama, lo ha escrito un amigo y yo le estoy dando forma. Pensé que me iba a costar menos tiempo, pero los cambios se me resisten y, aunque los tengo claros y desarrollados, me cuesta encajarlos en la estructura actual. Tendré que coger el hacha y ser inmisericorde; sólo entonces se consigue avanzar. Será mi próxima película. Tendré que reunir 3 millones de euros y parece que lo conseguiré. Es mucha tela, pero tengo mucha labia.
Y como soy muy vago, estoy a punto de dar por finalizado el guión del capítulo piloto de un proyecto de serie para televisión. La biblia ya está escrita. Esto lo hago con un amigo, colaborador, socio, más vago que yo. No creo que ninguna cadena tenga los cojones para hacerla, pero al menos estoy seguro de que les vamos a llenar de incertidumbre a todos los que lo lean. Dentro de dos meses informaré sobre la serie. La propuesta es interesante y sé de lo que hablo. Pero como conozco el paño, dudo del traje. Eso sí, si conseguimos montarla, no os vamos a defraudar, quedaréis enganchados.
Mañana me reuno con mi asesor fiscal. Dejo las montañas por un día y me enclaustro en un despacho de Madrid. Tengo que planificar el asalto al poder. Los tiburones me esperan con los dientes afilados. Están dispuestos a soltar pasta, pero sólo entienden el lenguaje de la sangre.

viernes, 20 de abril de 2007

Mañana

Siempre me gustó esa palabra: mañana. Será porque siempre dejo para mañana lo que he podido hacer hoy. Porque, vamos a ver, si lo hago hoy, ¿qué cojones hago mañana? Pues eso...
Ayer tuve una charla con Pig. Le dejé las cosas claras. Si todo va muy bien podré comenzar el rodaje a finales de octubre. Si va bien comenzaremos en febrero del 2008. Si va mal lo dejaremos para Julio del 2008. Si va muy mal... Si va muy mal todo se habrá ido a tomar por culo. Pero ésto no pasará.
He estado pensando en publicar el guión aquí, en este blog, pero no sé cómo hacerlo ni si debo hacerlo. Estaría bien hacerlo por entregas, hoy diez páginas, si tiene interés, diez páginas más, y así hasta las ciento diez que tiene ahora. Tendré que pensarlo. No sé si alguien lo ha hecho, pero siempre hay alguien que lo hace por primera vez. El que lea esto que dé su opinión... Aunque ya me la sé.
Voy a tratar de escribir todos los días, aunque sólo sea una frase, una palabra, una letra.